Ángeles con caras sucias
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Título | Angels with Dirty Faces |
Ficha técnica | |
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Dirección | Michael Curtiz |
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Producción | Samuel Bischoff |
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Guión | John Wexley Warren Duff |
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Música | Max Steiner |
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Fotografía | Sol Polito |
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Montaje | Owen Marks |
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Reparto | James Cagney Pat O'Brien Humphrey Bogart Ann Sheridan George Bancroft Billy Halop Bobby Jordan Leo Gorcey Gabriel Dell |
Datos y cifras | |
País(es) | Estados Unidos |
Año | 1938 |
Género | Gángsters |
Duración | 97 minutos |
Compañías | |
Productora | [[Warner Bros]] |
Distribución | Warner Bros |
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Ficha en IMDb |
Ángeles con caras sucias es una típica producción de la Warner dirigida por Michael Curtiz, en la que James Cagney y Pat O'Brien comparten protagonismo con Ann Sheridan y Humphrey Bogart.
[editar] Argumento
Rocky Sullivan y Jerry Connelly son dos pequeños delincuentes juveniles. Un día son sorprendidos mientras intentan robar unas estilográficas en un vagón de tren. Mientras Jerry consigue huir, Rocky es detenido. Tras múltiples salidas y entradas en prisión, Rocky acaba convirtiéndose en un gángster. Mientras tanto, Jerry acaba convirtiéndose en el padre Connolly, un sacerdote católico, que trata de salvar de la delincuencia a los jóvenes del barrio.
Tras un periodo en la cárcel, Rocky sale libre. Pretende recuperar 100.000 dólares de un atraco anterior, y que están en manos de su anterior socio, Jim Frazier. Pero éste le da largas, puesto que ahora trabaja para Mac Keefer, uno de los jefes mafiosos de la ciudad. Las cosas se van complicando, puesto que Rocky por una parte se convierte en el ídolo de los jóvenes a los que el sacerdote pretende redimir y por otra acaba matando a Frazier y Keefer. Tras ser detenido es condenado a muerte.
En un gesto de nobleza, y a petición de su viejo amigo Connelly, implora perdón y finge cobardía ante la silla eléctrica, con el objetivo de ser despreciado por los jóvenes y que de ese modo no le tomen como modelo.
[editar] Comentario
Esta magnífica película de Michael Curtiz fue comprada por la Warner a una pequeña compañía independiente que se había hecho con los derechos. Cagney se había peleado con la compañía, por lo que pudo renegociar su contrato. O'Brien y Cagney, dos actores de origen irlandés, que eran viejos amigos, representan de hecho en la película precisamente eso. Cabe destacar las actuaciones de Humphrey Bogart, que no alcanzaría el status de gran estrella hasta unos años más tarde, con el rodaje de Casablanca y Ann Sheridan.