Hiperhidrosis
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[editar] Descripción
La hiperhidrosis primaria es una condición que consiste en un exceso de sudoración que se produce por causas desconocidas cuando nuestro organismo produce más sudor del que necesita para regular la temperatura corporal. Muchas personas que presentan esta condición ven afectada su calidad de vida y sienten pérdida de control sobre ella ya que la transpiración se presenta independiente de la temperatura y el estado emocional. Esta alteración suele iniciarse en la infancia o pubertad y normalmente dura toda la vida. Se dice también que es hereditaria.
Sin embargo, la ansiedad puede contribuir a la sudoración. Muchas personas pueden caer en el círculo vicioso de ponerse nerviosos por sudar, y luego sudar más por ponerse nerviosos. Además, ciertos alimentos y olores pueden afectar más la condición.
Según las regiones afectadas por exceso de transpiración, se distinguen: sudoración palmar, sudoración axilar y sudoración facial (un fenómeno asociado a la sudoración facial es la ruborización facial, la cual consiste en el enrojecimiento del rostro).
Además, se puede distinguir hiperhidrosis primaria e hiperhidrosis secundaria: la primera puede iniciarse en cualquier momento de la vida; la segunda, puede deberse a desórdenes de la glándula tiroidea o pituitaria, diabetes mellitus, tumores, menopausia o ciertas drogas.
Se estima que el 1% de la población sufre de hiperhidrosis primaria, afectando de igual manera a hombres y mujeres.
[editar] Causas
La hiperhidrosis primaria tiene causa desconocida. Sin embargo, se sabe que la hiperhidrosis es causada por sobre actividad del sistema nervioso simpático, aunque esta hiperactividad puede ser causada por un funcionamiento anormal del cerebro.
[editar] Tratamiento
Cirugía (Simpatectomía torácica endoscópica o ETS). Sencilla operación que permite interrumpir la vía nerviosa simpática a nivel del tórax. Se realiza a través de una o dos pequeñas incisiones en el área de la axila, usando una técnica endoscópica. El nervio se cauteriza o se bloquea a través de un "clip". Dentro de los efectos secundarios puede haber sudoración compensatoria en otras zonas del cuerpo, o carencia permanente de transpiración; también puede presentarse el síndrome de Horner, que consiste en la caída del párpado.
Cirugía (Succión de la glándula sudorípara). Mediante una cirugía ambulatoria, se extraen las glándulas sudoríparas con una técnica parecida a la liposucción, a través de incisiones en las axilas.
Solución de cloruro de aluminio (hexahidratado). Consiste en la aplicación de soluciones antitranspirantes con mayor concentración de cloruro de aluminio. Puede resultar efectivo sólo para hiperhidrosis axilar.
Toxina botulínica tipo A (Botox). La toxina botulínica se inyecta en las glándulas sudoríparas bloqueando su funcionamiento.
Iontoforesis. Consiste en pasar una corriente eléctrica de bajo voltaje por agua o almohadillas humedecidas, la cual hace que proteínas superficiales de la piel se coagulen y bloqueen parcialmente los conductos sudoríparos.
Medicación oral. Las tabletas Robinul (su nombre oficial es glicopirrolato), Ditropan (oxibutinina) y Dixarit (clonidina) pueden ayudar a combatir la condición.
[editar] Hiperhidrosis y calidad de vida
La hiperhidrosis tiene una repercusión importante sobre la calidad de vida de quienes la padecen. Se puede convivir con ella pero a menudo puede causar estrés emocional, dificultando en ocasiones la vida personal, laboral y social del paciente.
En los casos más graves el exceso de sudor provoca que las personas se vuelvan retraídas y rehuyan la actividad social evitando situaciones donde necesitan entrar en contacto con otros, así como la dificultad en la manipulación de papeles, lápices, botones, herramientas o equipos electrónicos. La necesidad de evitar el saludo de manos obliga a muchas personas buscar tratamiento.
