Cañonera Pilcomayo
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La corbeta o cañonera Pilcomayo, histórica nave de guerra y protagonista de varias acciones durante la Campaña naval de la Guerra del Pacífico, fue construida en 1874 por orden del gobierno del Perú en los astilleros de Money Wigram & Sons en Blackwood, Gran Bretaña arribando a El Callao en 1875. Su casco de madera desplazaba 600 toneladas y tenía 271 pies de eslora. Su maquinaria, fabricada por la empresa J. Penn & Company de Greenwich, especificaba una potencia de 1080 caballos de vapor, alcanzando unos 11 nudos de velocidad máxima.
Su armamento consistía en diez cañones: dos pricipales de 70 libras y rayados -uno a estribor y otro a babor- cuatro cañones de 40 libras (4,5 pulgadas) dos por banda, también rayados y de avancarga, modelo Parrot, y cuatro cañones de 12 libras.
Bajo bandera peruana, participó en compañía de la "Unión" en el Combate naval de Chipana, el 12 de abril de 1879, contra la cañonera chilena "Magallanes". Fue Capturada por el blindado chileno "Blanco Encalada" el 18 de noviembre de 1879, al norte de Arica. Permaneció en servicio con la Armada de Chile hasta 1909. Posteriormente fue destinada como pontón en el puerto de Talcahuano, Chile.
[editar] Acciones
Tan pronto le fue notificado el bloqueo de Iquique por la Armada de Chile, el mando naval peruano dio ejecución a lo planeado para sus primeras operaciones. La "Unión" y la cañonera "Pilcomayo" zarparon de El Callao el 8 de abril a interceptar las líneas de comunicaciones marítimas chilenas al sur de Iquique, para negar los abastecimientos a los buques chilenos.
En la mañana del 12 de abril de 1879 y a la cuadra de la punta Chipana, la cañonera "Magallanes" , al mando del Comandante Juan José Latorre Benavente, avistó a los buques peruanos "Unión" y "Pilcomayo," que de inmediato gobernaron para acortar distancia con la cañonera. Ambos eran superiores a la cañonera "Magallanes" en andar y armamento.
A las 10.50 la cañonera "Pilcomayo" abrió el fuego a 3.550 metros, seguida por la "Unión". El Capitán Latorre Benavente decidió no responder el fuego de la cañonera "Pilcomayo," para concentrar su escaso armamento sobre la "Unión". Al tercer disparo logró un impacto generando un gran escape de vapor. La "Unión" se detuvo momentáneamente y después viró, abriendo distancia para reunirse con la cañonera "Pilcomayo" y ambas naves peruanas optaron terminar la acción.
El día 18 de noviembre de 1879, regresando el blindado chileno "Blanco Encalada" de Islay y en las cercanías de Mollendo, siendo cerca de las 09.00 horas, se divisaron tres humos al sur que se reconocieron como la corbeta "Unión", la cañonera "Pilcomayo" y el transporte "Chalaco", que estaban comandadas por los Capitanes de Navío Nicolás F. Portal y Carlos Ferreyros y el Capitán de Fragata Manuel A. Villavicencio, respectivamente.
La corbeta "Unión" que navegaba adelantada, al reconocer al blindado "Blanco" viró hacia el sur para advertir a los otros buques del peligro que les acechaba.
Reunidos los buques peruanos, adoptaron la siguiente táctica: la corbeta "Unión" trataría de atraer al blindado "Blanco Encalada" para evitar la captura de los otros dos buques, confiada en su mayor velocidad. Por lo tanto, navegó al oeste a baja velocidad para atraer al contendor.
La cañonera "Pilcomayo" navegó al sur a máxima velocidad y el transporte "Chalaco" cambió su rumbo al sureste para pegarse a la costa.
El Almirante Galvarino Riveros Cárdenas, al mando de la Escuadra chilena, decidió dar caza a la cañonera "Pilcomayo" y ordenó al Comandante del "Blanco", Capitán de Corbeta Luis Anacleto Castillo Goñi perseguir a máximo andar a la cañonera peruana.
El Comandante Ferreyros advirtiendo que la distancia se acortaba rápidamente y que la huida era imposible, reunió a sus oficiales en consejo, donde decidieron incendiar el buque y hundirlo antes de entregarse, batiéndose en retirada para dar tiempo para ejecutar el plan acordado.
A 5.000 metros, la cañonera "Pilcomayo" rompió el fuego en elevación sin dañar a su perseguidor. El blindado "Blanco" no rompió el fuego hasta los 4.200 metros, alcanzando inicialmente el pico del palo trinquete de la cañonera.
Mientras tanto, el Comandante Ferreyros hizo abrir las válvulas de fondo para inundar la máquina y santabárbaras y ordenó derramar todo tipo de material inflamable para hacerlo arder y provocar un incendio. Los cañones de popa se apuntaron sobre la escotilla de la cámara de oficiales para perforar el casco bajo la línea de flotación. Luego dispuso la destrucción de códigos, correspondencia y documentos del buque.
Comenzado el incendio, detuvo el buque y arrió los botes para que se embarcara la tripulación. El Almirante Riveros Cárdenas al ver señales con banderas blancas que se hacían desde los botes, dispuso cesar el fuego y parar la máquina para que el Teniente Roberto Anacleto Goñi Simpson abordara el buque peruano.
Abordada la cañonera, Goñi reemplazó el emblema peruano por el chileno y dedicó todos sus esfuerzos para salvar la nave zozobrante, atracándola al blindado "Blanco" para que con sus bombas de achique impidiera su hundimiento y simultáneamente reforzar al personal que apagaba los incendios. En dos horas lograron tapar las vías de agua con hombres buzos y apagaron los incendios. Los chilenos prosiguieron a llevarla en remolque al puerto de Pisagua y luego al puerto de Valparaíso, donde recibió reparaciones definitivas.