Guarrate
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Guarrate |
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Topónimo oficial | |||||
País | España ![]() |
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Organización: | |||||
- Com. autónoma | Castilla y León | ||||
- Provincia | Zamora | ||||
- Comarca | |||||
Código postal | |||||
Localización: | |||||
- Latitud | |||||
- Longitud | |||||
Superficie | 32 km² | ||||
Altitud | |||||
Distancia | 40 km de Zamora | ||||
Fundación | |||||
Población: | |||||
- Total | 362 hab., (INE 2005) | ||||
- Densidad | |||||
Gentilicio | guarranse | ||||
Alcalde | <ALCALDE> | ||||
Sitio web |
Guarrate es una localidad que se encuentra situada en el extremo sur de la provincia de Zamora, comarca de La Guareña, a 40 kilómetros de la capital. Tiene una superficie de 32 km². y una población de 362 habitantes que se dedican principalmente a la agricultura y ganadería. Son especialmente conocidas sus explotaciones de leche.
[editar] Historia
Hubo en Guarrate un asentamiento celta de corta duración, de ahí que no se conserve ningún resto arqueológico, y posteriormente se produjo uno árabe, del que tampoco se conserva nada. En 1561, se sabe por registros parroquiales que su población se reducía sólo a 25 vecinos.
En la segunda mitad del siglo XIX el pueblo pertenecía al Marqués de Viesca de la Sierra, cuya Casa-Palacio se conserva todavía, siendo hoy sede del Ayuntamiento.
En el año 1900 pertenecía ya por herencia a los Marqueses de Santa María de Silvela. En este año un incendio que duró ocho días destruyó gran parte del pueblo y Guarrate quedó en ruinas.
Sus propietarios regalaron al pueblo toda la madera necesaria para construir de nuevo sus casas. Gracias a la generosidad de sus dueños y la tenacidad y trabajo de sus habitantes, logró reponerse de sus ruinas, reconstruirse y convertirse en el pueblo que ha llegado hasta nuestros días.
Los hijos de los Marqueses de Santa Mª de Silvela se dedicaron principalmente a la Carrera Diplomática, con lo que, al no poder ocuparse de la administración del pueblo, en 1924 pasó a manos de cinco vecinos de Fuentesaúco.
En aquel tiempo, la tercera parte del terreno era monte de encina y, con los primitivos medios que de entonces se disponía, hubo que desmatarlo para poder ponerlo en cultivo.
Posteriormente, el pueblo fue vendido a sus habitantes por mediación del Instituto Nacional de Colonización, que adelantó el dinero.