T-X
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T-X es cyborg asesino de ficción, miembro del Ejército de Máquinas de Skynet. Aparece en 2003 por primera vez en la película Terminator 3: La rebelión de las máquinas, coproducción cinematográfica entre Estados Unidos, Alemania y Gran Bretaña, perteneciente a la serie Terminator y dirigida por Jonathan Mostow. Su papel es interpretado por la actriz Kristanna Loken.
El T-X es el prototipo más avanzado construido por Skynet, diseñado con la finalidad de asesinar a Kate Brewster y a otros futuros lugartenientes de John Connor.
Está formado por un endoesqueleto de combate diseñado para recibir ataques externos con una poli-aleación mimética exterior de metal líquido. Su principal fuente de energía es un reactor de fusión de plasma situado en el torso.
Su "clasificación Skynet" oficial es T-X Enhanced Logic Weapons Systems Cybernetic Warrior/Infiltrator Unit. El empleo de nanotecnología por parte del T-X le otorga regeneración avanzada y una serie de habilidades a través del contacto humano similares a su precursor, el T-1000, aparecido en Terminator 2: El juicio final. Además de fuerza y velocidad mejoradas, también lleva incorporadas varios tipos de armas a distancia y tiene la capacidad de infectar sistemas electrónicos con virus y tomar el control de estos. Su arma primaria es un cañón de plasma localizado en su brazo derecho.