Teoría de Adán-Dios
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La teoría de Adán-Dios fue una creencia que se encuentra en un discurso de Brigham Young (líder mormón) por primera vez en la década de 1850; según la cual Adán «es nuestro padre y nuestro Dios y el único dios con el que nosotros tenemos que ver» (1 Journal of Discourses 50-51). Young jugueteó otorgando a Adán diversos papeles en la historia bíblica, chocando en ocasiones frontalmente con muchos dogmas básicos cristianos: poniendo otras divinidades junto a Dios, estableciendo que Adán, el hombre, no había sido el primer ser creado en la Tierra, que Adán hombre era algo más que eso y nunca fue expulsado del paraíso, etc.
Algunos de los contemporáneos de Young interpretaron la doctrina como si estuviera asumiendo que Adán era el Dios de la Tierra y el padre de Jesucristo. Interpretada así, la doctrina era confusa y fue mal acogida incluso por otros líderes de la Iglesia de los Santos de los Últimos Días, así como por el público general mormón, que se posicionó de una manera más pragmática con respecto a la enseñanza.
Sin embargo, esta enseñanza en sí misma es extremadamente fácil de entender si la entendemos basados en dos creencias practicamente exclusivas a los mormones:
(1) los mormones creen en la pluralidad de dioses. No una pluralidad de adoracion de dioses al estilo de griegos y egipcios, ya que los mormones son monoteistas en adoracion (Ver Libro de Mormón, Jacob 4:5); sino una pluraridad de seres plenipotenciarios en los limites de sus dominios a quienes denominan Dioses. Recordemos que en el mormonismo un hombre justo y obediente llega a ser un Dios sobre los dominios que el Padre le otorgue.
(2) los mormones creen en la premortalidad de todo el genero humano; que cada persona que ha nacido en la tierra, vivió en la presencia de Dios antes de nacer; es decir que la preexistencia (o premortalidad) no es atributo sólo de Jesucristo, sino de cada ser humano. En esa vida premortal habrían habido personajes sumamente prominentes partiendo por Jesus y todos los profetas, siendo uno de suma preponderancia por consecuencia, Adán.
En ese sentido, Adán, habiendo sido sumamente justo en vida (hecho que se basa en las escrituras mormonas), habria sido perdonado y bendecido como un gran profeta dentro de su vida, y una vez muerto, habria seguido su obra y recobrado el poder y la honra que tuvo como uno de los hijos espirituales más importantes de Dios antes que el mundo fuese, sería en jerarquía, de abajo hacia arriba, el dios más bajo en la linea directa hacia Dios el Padre y por ende el único Dios con el cual tenemos que ver, en lo que a jerarquia familiar se refiere.
En otras palabras, el titulo Dios atribuido a Adan encierra la autoridad que aun tiene éste lo que respecta a su descendencia, como el Gran Anciano de Días.
Sin embargo no apunta a que Adán sea el Padre de Jesucristo, siendo este ultimo, el unico Dios a quien adoran los mormones. Los mormones por ejemplo no dirigen sus oraciones a Adán y saben que éste, aunque en su creencia es un personaje prominente, es una persona distinta al Padre de Jesús, y no dirigen adoración alguna a él.
[editar] Estatus actual
La posición de la IJSUD queda desde 1902 resumida en las palabras de un apostol: «la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días nunca ha fomulado o adoptado ninguna teoría concerniente al tema tratado por el Presidente Young con relación a Adán».
La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días enseña que Adán y Eva fueron expulsados del jardín de Edén, y luego recibieron instrucciones acerca de Jesucristo y la necesidad de arrepentirse y bautizarse para aceptar la oportunidad de recibir una redención en el Reino Celestial por medio de Jesucristo.[1]
Debe entenderse que la IJSUD la acepta como una enseñanza bajo contexto, pero no como doctrina canónica.
[editar] Referencias
- Enlace con la postura de la IJSUD (requiere registrarse)
- Journal of Discourses (dominio público), 1854-1886.
- Discurso original de Brigham Young
- Perla de Gran Precio, Moisés 6:51-68