Asentamiento israelí
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Los asentamientos israelíes son comunidades construidas en los territorios conquistados por Israel en 1967, durante la Guerra de los Seis Días, y controlados por el mismo desde esta fecha. Actualmente, dichos asentamientos se encuentran en tres áreas principales:
- Cisjordania, territorio parcialmente bajo control militar israelí y parcialmente bajo control de la Autoridad Nacional Palestina.
- El área de Jerusalén Este, incorporado en 1980 al municipio israelí mediante la Ley de Jerusalén.
- Los Altos del Golán, reclamados por Siria e integrados (no anexionados) al sistema administrativo israelí en 1981.
Junto a los actuales asentamientos, también existieron otros 18 en la península del Sinaí, 21 en la Franja de Gaza y cuatro en el norte de Samaria, pero fueron desmantelados en 1981 los del Sinaí, tras los acuerdos de Camp David con Egipto, y en 2005 los otros mencionados, tras el Plan de retirada unilateral israelí.
La política oficial israelí respecto a los asentamientos ha variado notablemente a lo largo de estas décadas, oscilando desde la promoción activa de los asentamientos a su desmantelamiento por la fuerza. Su permanencia y su estatus es, desde la década de 1970, uno de los contenciosos más importantes del conflicto palestino-israelí. Los sectores que se oponen a los asentamientos consideran que se trata de una forma de colonialismo que viola la IV Convención de Ginebra. Por su parte, el Estado israelí rechaza el término de colonia y prefiere hablar de implantación. A su vez, los sionistas recuerdan que Judea es la cuna del judaísmo y que la presencia milenaria de comunidades judías en Hebrón, Jerusalén o en Samaria están documentadas desde los textos bíblicos y antiguos.
