Brásidas
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Brásidas, espartiata hijo de Télide, fue un brillante general espartano. Vivaz, elocuente, inteligente y encantador, tanto como valiente. En el primer año de la guerra había rechazado una incursión en Mesenia y luego había combatido reciamente en Esfacteria, donde, sin embargo, una herida le puso fuera de acción.
En 424 adC asumió la conducción de la guerra. Marchó sobre el istmo, obligó a los atenienses a apartarse de Mégara y los mantuvo quietos allí. Luego se lanzó rápidamente hacia el Norte, a través de Tesalia y Macedonia, hasta la Calcídica, muy valiosa para los atenienses. Los atenienses no se percataron enseguida del peligro. Intentaron invadir Beocia, pero fueron totalmente derrotados por los tebanos en Delio, sobre la costa que está frente a Eubea, y renunciaron a toda tentativa de convertirse en una potencia territorial. Entonces se enteraron de lo que estaba ocurriendo en la Calcídica. Brásidas, mediante su tacto y su diplomacia además de la ayuda de Pérdicas de Macedonia, persuadió a una ciudad tras otra a que se rebelara. Finalmente, él mismo avanzó sobre Anfípolis.
Anfípolis había sido fundada por Atenas sólo trece años antes. El historiador Tucídides estaba a cargo de la defensa de Anfípolis, pero no se hallaba allí en ese momento. . Retornó rápidamente tan pronto como tuvo noticia del asedio, pero no llegó a tiempo. Anfípolis se rindió rápidamente, al ofrecérsele términos de rendición sumamente generosos. No se podía culpar a Tucídides de la habilidad de Brásidas como negociador, pero los enfurecidos atenienses necesitaban un chivo emisario y Tucídides fue exiliado. (Y debemos dar gracias por ello, ya que de otro modo no tendríamos su historia.) Ahora era Atenas la que estaba deseosa de paz, y logró obtener una tregua de un año. Pero Brásidas desempeñó el papel de un Cleón espartano. Pensó que la guerra debía continuar hasta completar la victoria espartana. Así, continuó con las operaciones para exasperación de los atenienses, y la tregua fracasó. Los atenienses se volvieron a Cleón. Había sido el gran general que había tomado Esfacteria y capturado 120 espartanos. ¿No podría hacer algo con Brásidas? En 422 adC, Cleón se vio obligado a conducir un ejército al Norte. Logró algunos éxitos, pero cuando intentó atacar Anfípolis, se puso claramente de manifiesto la superior capacidad de Brásidas. Su estrategia superó a Cleón y obtuvo una victoria. En la batalla, Cleón recibió la muerte, pero en cierto modo continuó su buena suerte, pues también Brásidas fue muerto en el combate. Así murieron los líderes belicistas de ambos bandos y, finalmente, quedaba expedíto el camino para la paz.
Brásidas fue alabado por Tucídides por su elocuencia, algo inusual en los lacónicos espartanos. Platón lo comparó con el legendario guerrero Aquiles.