Hipnos
De Wikipedia, la enciclopedia libre
En la mitología griega, Hipnos (en griego Ύπνος Hypnos, ‘sueño’) era la personificación del sueño. Era hijo de Nix, la noche, y hermano gemelo de Tánatos, la muerte no violenta. Su equivalente romano era Somnus.
Su palacio era una cueva oscura donde el sol nunca brillaba. A su entrada crecían amapolas y otras plantas hipnóticas. Según algunas fuentes, vivía junto con Tánatos en un palacio subterráneo cercano al de Nix. Según otras, lo hacía en una cueva bajo una isla griega, a través de la cual fluía Lete, el río del olvido.
En una ocasión Hera prometió a Hipnos la mano de una de las gracias, Pasítea, si le ayudaba a dormir a Zeus. El Sueño obedeció, pero Zeus se despertó iracundo y hubiera arrojado a Hipnos del Olimpo si no hubiera intervenido su madre Nix, que demostraba así el poder que ejercía tanto sobre los dioses como sobre los hombres.
La descendencia que tuvo con Pasítea la formaban las cosas que ocurrían en sueños, los Oniros. Los tres más importantes aparecían en los sueños de los reyes: Morfeo, Iquelo (o Fobetor) y Fantaso.
También Hera recurrió a Hipnos, a través de Iris, para que adoptara la forma de Ceix y, en sueños, se le presentara a su mujer y le explicara su muerte, pues la pobre Alcíone esperaba ansiosa el regreso de su marido ignorando que éste había muerto hacía tiempo.
Endimión recibió de Hipnos el poder de dormir con los ojos abiertos, para poder así vigilar constantemente a su amada Selene.
En el arte Hipnos era retratado como un hombre joven desnudo y con alas en los hombros o las sienes. También se le muestra en ocasiones con barba, parecido a su hermano Tánatos. A veces es representado como un hombre dormido en una cama de plumas con cortinas negras a su alrededor. Sus atributos incluyen un cuerno de opio inductor de sueño, un tallo de amapola, una rama de la que gotea el rocío del río Lete y una antorcha invertida. Morfeo es su principal ayudante y evita que los ruidos le despierten. En Esparta, la imagen de Hipnos siempre se situaba cerca de la de la muerte.