Shango
De Wikipedia, la enciclopedia libre
Shango es una de las deidades de la religión yoruba.
Tabla de contenidos |
[editar] Resumen
Shango es uno de los más populares Orishas del panteón Yoruba. Es considerado Orisha de los truenos, los rayos, la justicia, la virilidad, la danza y el fuego. Fue en su tiempo un rey tirano, guerrero y brujo, quien por equivocación destruyó su casa y a su esposa e hijos y luego se convirtió en Orisha.
[editar] El Orisha
Shangó es llamado Yakutá (el lanzador de piedras) y Obakosso (rey de Kosso). Fue el cuarto Rey de Oyo y también el primer awó, cambió el ashe de la adivinación con Orunmila por el de la danza, es dueño también de los tambores Batá, Wemileres, Ilú Batá o Bembés.
[editar] Familia
Fue esposo de Obbá, Oyá y Oshún. Fue hijo de Obbatala y Aggayu Solá, pero en otros caminos se señala como de Obbatalá Ibaíbo y Yembó o de Obbatalá y Oddua, sin embargo en todos los caminos se considera criado por Yemaya y Dadá. Hermano de la ultima, Oggun, Osun, Eleggua y Oshosi
[editar] Ofrendas y bailes
Las ofrendas a Shango incluyen amalá, hecha a base de harina de maíz, leche y quimbombó, plátanos verdes, plátano indio, otí, vino tinto, maíz tostado, cebada, alpíste, etc. Se le inmolan carneros, gallos, codornices, jicoteas, gallina de guinea, palomas, etc
[editar] Patakki de Shango
Furibundo con sus descendientes al saber que Oggún había querido fornicar con su propia madre, Obatalá ordenó ejecutar a todos los varones. Cuando nació Shangó, Elegguá (su hermano) se lo llevó escondido a su hermana mayor, Dadá, para que lo criara. Al poco tiempo nació Orula, el otro hermano, Elegguá, también temeroso de la ira de Obatalá, lo enterró al pie de la ceiba y le llevaba comida todos los días. El tiempo transcurrió y un buen día Obatalá cayó enferma. Elegguá buscó rápido a Shangó para que lo curara. Luego de que el gran médico Shangó curó a su padre, Elegguá aprovechó la ocasión para implorar de Obatalá el perdón de Orula. Obatalá accedió y concedió el perdón. Shangó lleno de gozo cortó la ceiba y de ella labró un hermoso tablero y junto con él le dio a su hermano Orunmila el don de la adivinación. Desde entonces Orunmila dice: “Maferefum (bendición) Elegguá, maferefum Shangó, Elegbara”. También por la misma razón el ékuele de Orunmila lleva en la cadeneta un fragmento del collar de Shangó (blanco y rojo) por una punta. Desde entonces Orunmila es el adivinador del futuro como interprete del oráculo de Ifá, dueño del tablero y consejero de los hombres.