Universidad Centroamericana "José Simeón Cañas"
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Universidad Centroamericana "José Simeón Cañas" | |
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Lema | "Universidad para el cambio social" |
Fundación | 15 de septiembre de 1965 |
Tipo | Privada, sin fines de lucro |
Rector | Dr. José María Tojeira |
Estudiantes | 8,700 |
Afiliación | Compañía de Jesús |
Localización | San Salvador, El Salvador |
Dirección | Bulevar Los Próceres, San Salvador |
Teléfono | (503) 2210-6600 |
Sitio web | www.uca.edu.sv |
Centro de educación superior de El Salvador, de capital privado sin fines de lucro, también conocida como UCA. El campus universitario se localiza en Antiguo Cuscatlán (ciudad que pertenece al área metropolitana de San Salvador), la extensión es de aproximadamente 22 manzanas, cuenta con siete edificios de aulas, seis aulas magnas, dos auditorios, biblioteca, laboratorios, centros informáticos, polideportivo y otras dependencias como el Instituto de Derechos Humanos, Radio UCA, imprenta, etc. Posee un alumnado de ocho mil setecientos estudiantes, distribuidos en diez licenciaturas, cinco ingenierías, cuatro profesorados, dos técnicos y diez postgrados; los cursos son impartidos por trescientos cuarenta profesores.
[editar] Historia
La UCA fue fundada en septiembre de 1965 por la Compañía de Jesús. Al fundarse, el gobierno y la clase empresarial esperaban que asumiera el rol de centro universitario para los egresados de los colegios católicos de clase alta, como alternativa a la estatal Universidad de El Salvador, que era acusada de promover ideas marxistas y desestabilizar el orden social. Con esta esperanza, el gobierno del Coronel Julio Adalberto Rivera, sancionó una ley de universidades privadas y concedió las autorizaciones oficiales a la nueva universidad.
Al crearse, la universidad ofrecía las carreras de economía, ingeniería industrial y administración de empresas; posteriormente en 1969 creó las carreras humanistícas de filosofía, psicología y letras. En 1970 con un crédito del Banco Interamericano de Desarrollo se inició la construcción del actual campus. A mediados de la década de los 70, la universidad, bajo la dirección del rector Román Mayorga Quirós adopto una línea de pensamiento cada vez más progresista en aspectos políticos y sociales, de acuerdo a los cambios ideológicos que experimentaba la Compañia de Jesús, luego del Concilio Vaticano II. En 1976, el jesuita Ignacio Ellacuría, entonces catedrático de la universidad, lanzó duras críticas, al gobierno del presidente Arturo Armando Molina por abandonar un plan de reforma agraria, en un editorial de la revista universitaria ECA, posteriormente el gobierno retiró el pequeño subsidio que otorgaba a la universidad y esta paso a ser blanco de agresiones por parte de grupos de ultraderecha. A partir de 1977, la UCA respaldó la línea pastoral del Arzobispo de San Salvador, Oscar Romero y su escuela de teología, dirigida por el jesuita Jon Sobrino se convirtió en uno de los exponentes latinoamericanos de la Teología de la Liberación. En marzo de 1977, el sacerdote jesuita Rutilio Grande fue asesinado y en varias ocasiones, hubo amenazas contra la comunidad jesuita de la universidad, incluyendo atentados con bomba dentro del campus universitario.
En 1979, Ignacio Ellacuría asumió la rectoría de la Universidad y continuó la línea de proyección social universitaria, promoviendo el estudio de la realidad nacional y un mayor compromiso de la Universidad con los sectores populares. Durante de la década de los 80, hubo nuevas amenazas y atentados contra la Universidad. A partir del estallido de la Guerra Civil de El Salvador, el rector Ellacuría, fue uno de los primeros promotores del diálogo y la negociación como único camino a la paz.
El 16 de noviembre de 1989, el rector de la Universidad, Ignacio Ellacuría; el vicerrector académico, Ignacio Martín-Baró; el director del Instituto de Derechos Humanos de la UCA, Segundo Montes; el director de la Biblioteca de teología, Juan Ramón Moreno; el profesor de filosofía, Amando López, junto con otro jesuita, Joaquín López y López, y dos mujeres, colaboradoras de la Universidad, Elba y Celina Ramos fueron asesinados por un pelotón del Batallón Atlacatl de la Fuerza Armada de El Salvador.
Estos asesinatos asestaron un golpe muy fuerte a la estructura universitaria, que inició un lento proceso de recuperación, bajo la dirección de los sucesores de Ignacio Ellacuría, los rectores Francisco Javier Ibizate, S. J. y José María Tojeira, S. J., la Universidad ha continuado su proyección social y ha mantenido la línea de pensamiento progresista que la caracterizó en las décadas pasadas.
En 1990, la universidad recibió el Premio Príncipe de Asturias de Comunicación y Humanidades, como reconocimiento a su defensa de la libertad y los derechos humanos