Cielo (religión)
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El Cielo es un concepto de más allá presente en muchas religiones y filosofías espirituales.
Quienes creen en él afirman que el cielo (o el Infierno) es el destino final en el más allá para muchos o todos los humanos. En casos inusuales, algunas personas han tenido, según muchos testimonios y tradiciones, conocimiento personal del Cielo, con el presunto fin de adoctrinar al resto de la humanidad sobre la vida, el Cielo y Dios.
[editar] Concepciones
Aunque hay abundantes y diversas fuentes para concepciones del Cielo, la visión típica del creyente parece depender en gran medida de su tradición religiosa particular. Diversas religiones han descrito el Cielo como poblado por ángeles, demonios, dioses o héroes. El Cielo suele ser interpretado como un lugar de felicidad eterna. Generalmente se cree que la relación entre este concepto y la esfera celeste fue propuesta por primera vez por los antiguos astrónomos-sacerdotes (véase también astrología).
El concepto de cielo fue supuestamente importado al Judaísmo desde el Zoroastrismo, quizá por el profeta Daniel debido a su exposición a los magos zoroastrianos de la corte de Darío I. La creencia en el cielo parece haber suplantado el anterior concepto de Sheol (mencionado en Isaías 38:18, Salmos 6:5 y Job 7:7-10).
Los conversos judíos a este concepto de cielo e infierno incluían el grupo conocido como los fariseos. Los dogmáticamente conservadores saduceos mantuvieron su creencia en el Sheol. Aunque eran los saduceos quienes representaban la mayoría religiosa judía, fueron los fariseos quienes mejor soportaron la ocupación romana, y su creencia en el cielo y el infierno zoroastrianos fue transmitida al Cristianismo y al Islam (donde el cielo es llamado Jannah).
En el Cristianismo, el cielo es un retorno al estado de la humanidad anterior a la caída, un segundo y renovado Jardín del Edén en el que la humanidad se reúne con Dios en un perfecto y natural estado de existencia eterna. Los cristianos creen que esta reunión se logra mediante la obra redentora de Jesucristo de morir en la cruz por los pecados de la humanidad.