Guity Novin
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Guity Novin nace en Kermanshah (Irán) en 1944. Ella vive y trabaja Actualmente en Vancouver y Toronto. Ella graduó como el instituto de los artes finos en Teheran, Irán (1970). Ella exhibió sus pinturas en Salon d' autumn en París. Ella se trasladó a Holanda y estudió más adelante en el voor Beeldende Kunsten de Vrije Academie (1974). Ella exhibió sus pinturas en la galería de Noordeinde. Un año más tarde, ella se trasladó a Manchester, Inglaterra (1976), y ella exhibió sus pinturas en Didsbury Library (1978). En juried la competición, sus pinturas fueron seleccionados para la exposición en el E.C.A en Theatre nacional, Londres (1979). Ella entonces emigró a Canadá (1980). Ella vivió en Kingston, Ontario (1979-83), Montreal (1983-84), y Ottawa (1984-1996). Finalmente, ella se trasladó a Vancouver, Colombia británica. Ella exhibió sus pinturas en Kingston (galería de Brock Street), Montreal (galería de Sherbrooks), Ottawa (las galerías de Artex y de Trillium), Toronto (galería de Christopher Hughes), y Vancouver (galería de Guthenham). Sus pinturas están en galerías y museos privados del gobierno alrededor del mundo. Sus ilustraciones se publican en Le Carnaval de la licorne (2001)[1]. Ella es un miembro del comité nacional de los artistas de la UNESCO.
[editar] El transpresionismo y aspectos filosóficos de la pintura de Guity Novin
Guity Novin tiene un lugar especial en la historia del arte durante el período después de los años ochenta. Ella es una del grupo selecto de los pintores que motivan sus trabajos con ideas filosóficas. Guity Novin utiliza su arte como herramienta para comunicar sus ideas estéticas. Ella introdujo el transpresionismo del EL como nuevo movimiento del arte en 1994. El trabajo de Guity Novin es marcado por una sensación de la inspiración y del misterio. Ella piensa profundamente de la cuestión de la existencia. Esto no es totalmente extraño en su forma fenomenal, pero da vuelta para ser enigmático en su forma de la idea. El artista interpreta mitos y la leyenda, de que es portent de nuestra tragedia humana en este universo. Sus pinturas sugieren que el arte auténtico esté practicado para traer la humanidad junta en nuestras memorias colectivas. Sus pinturas nos invitan a que celebremos nuestras emociones en un absurdo y el universo caótico, de que es organizado por nuestros pensamientos. El transpresionismo aparece como paradigma positivo para nuestra tragedia humana, y Novin la ilumina de modo que pudiéramos compartir nuestros dolores y alegrías. Esto conduce, en el análisis final, está para una renacimiento.