Txindoki

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Txindoki o Larrunari
Vista del Txindoki y su arista.
Elevación	1.346
Cordillera	Montes Vascos
Prominencia	198
Coordenadas	43°01′ 25,74 N°2′ 05
Tipo	Cima Principal (Cat.: 1+)
Ruta más fácil	Desde Larraitz.
País	España

El monte Txindoki o Larrunarri, de 1.346 m de altitud, y situado en la sierra de Aralar (entre Guipúzcoa y Navarra), es uno de los montes más emblemáticos del territorio histórico guipuzcoano. A sus pies se sitúa la ermita de Nuestra Señora de los Remedios, en Larraitz, Guipúzcoa País Vasco (España), muy venerada por los habitantes de los alrededores. La leyenda dice que en su cumbre "Mari", la diosa por excelencia del Olimpo Vasco, tiene una de sus residencias.

Algunos le llaman el Cervino Vasco o de Aralar, en una exageración de sus cataractrísticas. Forma parte del Parque Natural de la Sierra de Aralar.

Cumbre del Txindoki.

[editar] Descripción

Visible desde todos los puntos del País Vasco, es el referente de la sierra de Aralar. Marca uno de sus límites y bjo su cumbre se extienden las campas donde pastan multitud de rebaños de obejas.

Su alfilado pico de cáliza y su arista, emblemática para los alpinistas y amantes de la escalada, se alzan sobre el entorno verde de los extensos pastizales y bosques de hoja caducas.

Su nombre es Larrunarri o Larrunari y su contracción Ñañarri, pero es mucho más conocido como Txindoki, nombre de una borda de pastores que se sitúa a los pies de la cumbre, al este, en terrenos de Amézqueta.

La mole calíza se alza sobre el Santuario de Larraitz, que esta a 401 m de altitud, con sus 1.000 m más. Queda visible la arista y el barranco, poblado de bosque autóctono, que caen desde la cumbre.

LA vegetación esta formada por robles, hayas, espinos albares y un sin fin de árboles de las latitudes cantábricas, sin que falte alguna especie foránea como el pino insignis, que van dejando paso a los pastos según se gana altura.

El terreno calízo hace su aparición con multitud de acomulaciones de rocas y el paisaje toma el aspecto típico de las zonas de kársticas y se llena de pequeñas construcciones, escondidas en las depresiones del terreno y entre los escasos árboles, que suelen habitar los pastores de ovejas en las temporadas que menatienen sus rebaños en las campas de Aralar.

Abunda el jabalí y el venado, aunque son difíciles de ver, y se ha llegado a ver incluso algún lobo. Los buitres y los cuervos son las aves que más se dejan ver, pero es común ver alguna rapaz.

Los alrrederores del Larrunarri están llenos de monumentos megalíticos que son testimonio de la ocupación de estas tierras desde la prehistoria. Los dólmes, menires y túmulos jalonan las campas de Aralar recordando que, en el pasado, había habitantes que se mantenían de la caza y el pastoreo por estas mismas campas donde hoyt siguen pastando las ovejas.

[editar] La arista del Txindoki

Desde el aparcamiento de Larraitz se asciende por el camino normal hasta Gaztesuiko langa de donde por un sandero al este emprendenos una dura subida, alcanzando altura rápidamente, hasta situarse en la base de la roca en Amezti. Desde allí se asciende los primeros resaltes que son de dificultad sencilla, calificados como II, y se llega al primer paso de dificultad IV, un diedro. Seguimos adcendiendo con alguna dificultad leve, gada III, y marchaos sobre la arista para pasar por una brecha y llegar a una chimenea, todo ellos de dificultad III o III+, para alcanzar de nuevo el vertice de la roca y de nuevo, por otra chimenea, alcanzamos la cresta. La pared que encontramos, el frontón se salva mediante unos buenos agarres, esto tiene dificultad IV. Por la vertiente sur pasamos a un pequeño rellano y una canal herbosa hasta el diedro de salida (al que se entra por la derecha) se supera este, grado IV, y se continua rodeado el extraplomo por la izquierda, grado IV, y siguiendo la rampa alcanzamos la cruz de Erlabeltzeko punta (1.316 m) y siguiendo un camino, estrecho pero bueno, se alcanza la cumbre.

[editar] La leyenda

Una de las moradas de Mari esta en esta montaña, que alterna con otras como el Amboto, el Oiz o el Aketegi. Y no es de extrañar que se haya elegido este monte para la ubicación. No en vano su alfilado pico es visible desde cualquier parte del país, y desde él se divisan todas las otras cumbres, moradas, de esta mítica bruja.

Txindoki.

En 1927 describían así al Txindoki y sus tradiciones en la revista Pyrinaica:

Al norte del Aralar, se yergue majestuoso e imponente, encumbrado y denso, el peñascal de Larrunarri. Otros lo conocen por el más típico nombre de Txindokí y en el Goyerri guipuzcoano lo llaman tambien Nañarri, quizá por parecer más delgado y frágil visto por este lado. Pero por donde quiera que se le mire, siempre es imponente y se presenta majestuoso a nuestra vista: parduzco en los dias grises, azulado en días de sol. Los tejos, espinos, jarales y demás arbustos desparramados por sus laderas, tienen raíces de sangre entre sus duras rocas. Se alza a 1.430 metros sobre el nivel del mar y aunque esta altitud sólo le permite ocupar el tercer lugar entre sus hermanos, Gambo e Irumugarrieta son más altos que el Larrunarri, es siempre el más majestuoso. Txindoki, visto desde el vallecito de Zaldivia, tiene alguna semejanza con el perfil del Cervino.

Si la mítologia nos dece que Mari mora el su cima, a sus pies los hombres y mujeres que residen a la sombra de cumbre van a prestar deboción a la católica Virgen de NUestra Señora de los Remedios que tiene su ubicación en el Santuario de Larraitz. Los poderes de la precristiana Mari han pasado a la ortodosa virgen a quien se le atribuyen toda clase de logros, logros que, para muchos de sus debotos, son milagros.

La ermita es una sencillac onstrucción de mampostería en dodne se guarda una imagen del siglo XIV de la virgen. Hay otra imagen del siglo XII de esta misma virgen que esta ubicada en la iglesia parroquial de Abaltzisketa.

[editar] Rutas de ascenso

La ruta convencional es la que parte de Larraitz y pasa por el colado de Egurra. Hay varianates a esta ruta y esta la arista, bien por su cresta o bien por su pie.

Desde Larraitz por Egurra.

Se sale del aparcamiento de las instalaciones de Larraitz (401m)y se sigue el magnifico camino que comienza a rodear la arista por el norte. Seguimos por lo que se conoce como Gaztesuiko langa y pasamos al lado de un pinar. Poco después llegamos a la fuente de Oria Iturri (860 m) y siguiendo el ancho camino subimos a la derecha hacia las majadas de Zigarate o Ziate donde encontramos la primera borda, la bekoa (920m) nada más doblar a la izquierda y superar una pequeña cresta. Dejamos una fuente que se hunde en el cauce de un pequeño y rcien nacido reiachuelo y alcanzamos la borda de Ziate Goikoa, la de arriva, (1.008m). Seguimos el camino y pasamos por debajo del collado de Zaldiarrate (1.148 m) llegamos al de Egurra (1.154m). Sobre nostros se alza la cima en su último y más pendiente tramo. Seguimos elcamino marcada entre la hierba y las rocas hasta que desaparece la hierba y torcemos a la izquierda sacendiendo entre rocas hasta la cima.

Larraitz por Muitze.

Se comienza la ruta igual que la anterior hasta pasar Gaztesuiko langa (540 m). Tomamos una senda a la izquierda con la que cruzamos los prados de Urtzabal y de allí llegamos al rellano de Urtzabal goikoa (se puede llegar aquí directamente desde Larraitz por el camino del repetidor) de aquí cruzamos Mallaki y nos introducimos por las barrancas de Larrunarri (1.346 m) y Larraone (1.199 m). Siguiendo la regata de Muitze erreka vamos accendiendo hasta el circo herboso de Muitze, junto a la chabola de pastores y de allí, por el paso de Arrategorri, llegamos a la cueba de Marizulo y a las ruins de la borda Txindoki (de donde en monte toma el nombre) y llegamos al colado de Egurra. De Egurra se sigue el itinerario anterior.

De Larraitz por la base de la arista.

Se inicia el itinerario normal hasta Gaztesuiko langa de donde por un sandero al este emprendenos una dura subida, alcanzando altura rápidamente, hasta situarse en la base de la roca en Amezti. Se recorre la base dela arista hasta llegar a una canal herbosa que se asciende hasta llegar a la cruz de Erlabeltzeko y por la cresta, cómodamente, se alcanza la cumbre.

Tiempos de acceso