Unidad de operaciones especiales

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Miembros de la Unidad de Operaciones Especiales de la Infantería de Marina española.

Las unidades de operaciones especiales (también llamadas fuerzas de operaciones especiales o fuerzas especiales) son unidades militares y policiales formadas y entrenadas para llevar a cabo misiones de guerra no convencional, antiterrorismo, reconocimiento, rescate de rehenes, detención de delincuentes peligrosos y acciones especiales. Las fuerzas especiales normalmente están comprendidas por pequeños grupos de soldados y policías altamente entrenados armados y provistos de equipamiento especializado, y que operan bajo los principios de autosuficiencia, camuflaje, velocidad, y trabajo en equipo.

[editar] Un término ambiguo

El término como tal es ambiguo y muchas veces no es fácil saber cuantas ni cuales unidades son de operaciones especiales.

Una fuerza especial no es lo mismo que una fuerza de élite. Una fuerza de élite es un grupo de soldados escogidos por su competencia y asignados a la misma unidad.

Para algunos autores las fuerzas especiales son unidades de élite en algún grado, por la forma en la que se seleccionan, entrenan y operan^[1]; pero no todas las fuerzas de élite son fuerzas especiales.

Una unidad de élite debe ejecutar la misma acción que una unidad militar regular, pero mejor, y esto difícilmente puede denominarse fuerza especial; un ejemplo es la Guardia Imperial de Napoleón.

Las fuerzas especiales tampoco deben ser confundidas con especialistas militares, que simplemente son gente con habilidades y tareas especiales dentro de un ejército, como médicos militares, ingenieros y mecánicos. Un grupo de fuerzas especiales puede incluir gente con entrenamiento específico; pero, aparte de eso, los términos no tienen nada que ver.

[editar] Selección y entrenamiento

Fuerzas especiales chilenas.

El proceso de selección para una fuerza de operaciones especiales es normalmente extremadamente riguroso, con entrenamientos tras el reclutamiento de más de dos años. Algunas misiones pueden requerir entrenamiento especial.

De esta forma todas o casi todas incluyen en su plan de entrenamiento:

Supervivencia en distintos ambientes (ártico, desierto...).
Tiro con distintos tipos de armas.
Artes marciales.
Pruebas de resistencia.
Submarinismo.
Paracaidismo.

Los oficiales que mandan estas unidades suelen recibir también entrenamiento específico porque, entre otras peculiaridades, suelen trabajar aislados sin tener a ningún superior a quien acudir^[1].

Como el trabajo de las fuerzas especiales es a menudo efectuado en secreto y está relacionado con información clasificada, los candidatos tienen que pasar pruebas extremas, con altos índices de desgaste. Los candidatos también deben tener autorización. Las fuerzas especiales deben trabajar con las agencias de inteligencia, facilitando la acción rápida en respuesta a la información.

Las unidades de fuerzas especiales también pueden ser utilizadas para entrenar a las fuerzas locales extranjeras cuando se da ayuda militar a otros países, por lo que el entrenamiento especial incluye idiomas y culturas extranjeros. Por el secreto que rodea su entrenamiento y trabajo, las fuerzas especiales están rodeadas de un aura de misterio, y han sido frecuentemente el tema de ficción militar y películas de acción.