Charro
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La palabra charro proviene del vascuence txar, palabra que significa «campesino» o "rústico". En cuanto a charro, por esta palabra se conoce al oriundo de Salamanca (Castilla y León - España), de ahí pasó a México, donde quiere decir jinete.
En algunos paíes de habla hispana, llaman charro también al mariachi. En realidad, este último es el músico más representativo de México mientras que el charro es el jinete tradicional.
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[editar] El Charro Mexicano
El charro es un icono de la mexicanidad y practica la Charrería que está considerada como el deporte nacional en México, aunque el Fútbol y otras actividades sean hoy día mucho más populares que ésta.
Es el típico hombre "de a caballo" como son el huaso chileno, el llanero venezolano o el gaucho argentino.
[editar] Origen
Con los conquistadores españoles los caballos fueron reintroducidos al continente americanos después de miles de años de su extinción. Estos animales, las armas de fuego y las enfermedades del Viejo Mundo permitieron una conquista relativamente rápida.
En el Virreinato de la Nueva España a los indígenas les estaba prohibido montar o poseer caballos (con excepción de los tlaxcaltecas nobles). Para las labores de ganadería sin embargo era necesario emplear vaqueros preferentemente mestizos y en pocos casos indígenas; entre las condiciones para otorgarles permisos para montar estaban el ser empleados en un hacienda, utilizar sillas distintas a las militares y vestir con cuero o gamuza por lo que a éstos vaqueros se les llamaba "cuerudos".
Con el tiempo, tanto los hacendados como sus empleados conformaron, primero en el Altiplano Mexicano y después en casi todo el país, un estilo hípico nuevo adaptado a las características de un territorio que alterna valles con sierras, barrancos y cañadas.
Después de la independencia proliferaron los hombres "de a caballo" propietarios de pequeñas granjas y arrendadores independientes que por su condición de mestizos con rasgos mulatos o indígenas eran conocidos como chinacos mientras que a los empleados de las haciendas se les llamaba simplemente "caporales" y"vaqueros".
Los hacendados y rancheros ricos gustaban de los trajes bordados al estilo de los charros de Salamanca, España, mismos que fueron modificados hasta constituir un atuendo completamente distinto.
El general Ignacio Zaragoza en 1861, durante el gobierno de Benito Juárez crea el primer "Cuerpo de Rurales", que eran auxiliares del ejército así como encargados de perseguir asaltantes de caminos y poblados rurales. Durante período de Porfirio Díaz se caracteriaron por garantizar la seguridad y también por sus abusos. Eran jinetes muy experimentados y estaban uniformados con trajes de charro de color gris y sombrero.
Para mediados del Siglo XIX, los "de a caballo" en México se enfrentaron en la Guerra de Reforma, los charros de abolengo se acercaron al "Príncipe extranjero" Maximiliano de Habsburgo que buscaba rodearse de ellos para integrarse a México y a sus tradiciones, incluso se le atribuye la modificación al pantalón de Charro. Por otra parte, los Plateados que eran rancheros acaudalados pero liberales y los chinacos peleaban por la República.
El marqués de Guadalupe Carlos Rincón Gallardo es considerado el padre de la charrería y es antepasado de muchos charros notables y jugadores de polo.
Se dice que la charrería organizada se originó en los estados de Jalisco, México y sobre todo Hidalgo.
[editar] Características
La silla de montar mexicana, no obstante el hecho de que es relativamente pesada comparada con otras, es muy cómoda tanto para el caballo como para el jinete y básicamente se conforma por un "fuste" o esqueleto de madera, cuerajes y estribos entre otros accesorios.
En lo que se refiere a los arreos y avíos el charro (o vaquero) mexicano fue imitado por el cowboy estadounidense luego de la colonización del territorio mexicano perdido a manos de los norteamericanos. De hecho la silla de montar tejana está basada en la mexicana.
Durante la Revolución Mexicana el caballo criollo mexicano prácticamente desaparació, debido a su excesivo uso durante el combate. Así que los caballos más utilizados para la charrería son el Cuarto de Milla, de origen norteamericano y el Caballo Azteca que es una raza reciente.
El Caballo Charro debe ser de mediana alzada, muy fuerte, de temperamento noble y veloz.
La "reata" o soga de lazar es indispensable para la charrería así como las espuelas, chaparreras y el...
[editar] Traje de Charro
Las haciendas, hasta principios del siglo XX constituían en la práctica pequeños feudos con jerarquías más o menos rígidas, esto también se hacíe evidente en la indumentaria: el traje de faena que el patrón y los varones de su familia utilizaban eran más lujosos y en ocasiones con colores distintos. Los charros más ricos, generalmente criollos vestían de lana con ornamentos en plata y los más modestos adornaban sus trajes con grecas de gamuza. Por otra parte, los peones (empleados "de a pie")se conformaban con manta de algodón y huaraches como calzado en lugar de botas.
Las principales creadoras de esta vestimenta han sido las mujeres del campo, quienes con gran habilidad e ingenio echaban mano de materiales menos lujosos que los de los patrones de sus maridos e hijos para confeccionarles prendas resistentes tanto como hermosas.
Con la Revolución Mexicana esta vestimenta se "democratizó" y pasó a ser el atuendo nacional.
[editar] descripción
El traje de charro reglamentado, que puede ser de faena o de gala, debe ser confecconado con lana, gamuza o la combinación de ambos materiales. Consta de pantalón, chaquetilla, camisa (en ocasiones chaleco), botines y corbata de rebozo.
Los colores permitidos son toda la gama de café, azul oscuro, marrón, gris y verde seco los cuales contrastan con las "grecas" o calados y las botonaduras. También se utiliza el rojo oscuro mezclado con negro únicamente en el pantalón de caporal y en los complementos de la montura. Colores como el blanco o el rosa están proscritos.
Los botines deben ser del color del cueraje de la silla, es decir miel, café o bayo. El traje negro es solamente para bodas o funerales y es el único que debe llevar botines negros.
La camisa, que puede ser "pachuqueña" o de "cuello doblado" dando preferencia al blanco y al color hueso, el color rosa y negro están proscritos.
[editar] sombrero de charro
El famoso sombrero, está hecho de fieltro de lana, de pelo de liebre o de paja de trigo y es una auténtica protección para el brillante sol de México y para la caída desde el lomo de un caballo. Por eso el verdadero sombrero de charro es de ala ancha, levantado de la parte posterior; lleva en la copa cuatro "pedradas" que le dan resistencia en caso de impacto.
De acuerdo a la región presenta variantes: en las zonas más secas, el ala es más ancha que en las zonas boscosas, y en aquellas con mayor humedad, los materiales son más frescos y ligeros que en las tierra altas.
Suelen adornarse generalmente con toquillas y ribetes bordados o "calados". Los tipos de sombrero más usados son: el "San Luis Moderado", "Pachuca", "Cocula", "Hacendado", etc.
Un sombrero de charro verdadero se manda hacer con artesanos especializados y es muy distinto al que se vende en las tiendas de "souvenirs" para turistas.
[editar] Contexto Social
No hay que confundir al "charro" con el campesino mexicano humilde o "peon de hacienda", si bien ambos usaron sombrero ancho durante mucho tiempo. El charro al ser terrateniente o empleado de confianza de éste (dueño de la tierra), tenía generalmente un status social "superior" al de los otros campesinos.
Con excepciones notables como la del mismísimo caudillo revolucionario Emiliano Zapata o Benjamín Argumedo el charro, a pesar del origen etimológico de la palabra al principio mencionado, es en muchos casos conservador y con frecuencia reaccionario. Por eso, en el sindicalismo mexicano se le llama "líder charro" a aquel que representa los intereses del patrón y no de los agremiados. (Una curiosa paradoja es el caso del Jorge Negrete quien en el cine representaba al charro, pero como sindicalista fue notable por su honestidad y por las conquistas laborales que logró en su tiempo.)
Los vaqueros arrendadores, pastores y arrieros no eran considerados necesariamente charros, pero aspiraban a serlo. De manera bastante similar al feudalismo medieval, en las haciendas mexicanas, los charros tenían un prestigio caballeresco.
El discurso oficial de las primeras décadas del siglo XX estableció al charro como arquetipo del mexicano al lado de la china poblana.
No obstante el origen clasista del charro mexicano, en la actualidad, en los equipos que practican la charrería hay atletas tanto humildes como acaudalados que destacan por su desempeño en un ambiente de igualdad (al menos) durante las prácticas y encuentros.
En las zonas rurales, la posición social del charro ha sido emblemática, aunque desde hace varias décadas, con la influencia globalizadora y de la "modernidad" han cambiado mucho las cosas.
El fenotipo más común en el charro es el del criollo y el mestizo con facciones predominantemente ibéricas, esto también varía de acuerdo a la región: en Jalisco hay charros de pelo claro; en la costa del golfo los hay con rasgos mulatos y en el sur se ve más el tipo mestizo cercano al indígena. Curiosamente una buena parte de los descendientes de inmigrantes libaneses se ha integrado al ambiente de la charrería.
Existen en Estados Unidos asociaciones de Charros, tanto aficionados como profesionales, debido a la enorme población de origen mexicano en ese país.
[editar] Cultura y Espectáculo
En el México actual la palabra lana es sinónimo de dinero, probablemente este término venga de ésa época, en la que el uso de esta fibra era distintivo de las clases dominantes en el campo. Otro caso similar es el del imperativo "picale" (con las espuelas al caballo) como sinónimo de "corre" o "apúrate". Este "pícale" también ha derivado en "ándale" con la misma función.
En el cine, el charro ha sido tema tan recurrente como el "cow-boy". Algunos de los charros cinematográficos han sido: Pedro Infante, Luis Aguilar, Tito Guízar entre otros. Jorge Negrete es para muchos dentro del medio de la charrería el mejor representante del Charro Mexicano en el cine. Otro charro del espectáculo notable por sus brillantes espectáculos ecuestres ha sido Antonio Aguilar.
El Charro cancionero y bailador del cine mexicano no es tan ficticio como sus críticos pretenden, ya que antes de la era de los medios masivos de comunicación, la gente del campo se entretenía haciendo música y bailes, esto es la fuente del folclore. En México la cultura de la fiesta y de la convivencia, hicieron del charro un personaje alegre, un tanto fanfarrón y un ente completamente social a diferencia del vaquero estadounidense.
En muchas mujeres de hispanoamérica aún produce suspiros el gaucho, el rejoneador o el charro, tal vez por que en el incosciente colectivo representan la virilidad. Debido a la rudeza de su práctica, a estos personajes también se les relaciona con el macho, pesto es más bien un prejuicio asociado al "típico hombre latino", pero el lastre del machismo no es exclusivo de los latinoamericanos ni de los jinetes, ni de una cultura en particular.
Aún cuando México se caracteriza por su riqueza y variedad folclórica, la imagen del Charro identifica a México debido a que su uso no ha estado limitado a una sola región y a que representa el mestizaje mismo que se considera la base de la identidad mexicana.
[editar] La Mujer en la Charrería
Las Asociaciones de Charros, a la manera provinciana y tradicional una "Reina de los Charros" cada año, que, es una joven perteneciente a una asociación o a una región que comprende varias asociaciones. Su función es social y son encargadas de inaugurar temporadas o festejos.
En un contexto con cada vez más equidad de género, la amazona es una deportista activa en el medio de la Charrería y su principal disciplina es la "escaramuza charra". Para esta se utiliza una montura llamada albarda charra. Hay mujeres que practican otras suertes también muy intrépidas y espectaculares.