Gonzalo Sánchez de Lozada

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**Gonzalo Sánchez de Lozada**
Duración del mandato:
6 de agosto de 1993 - 6 de agosto de 1997
6 de agosto de 2002 - 17 de octubre de 2003
Antecesor:	Primer mandato: Jaime Paz Zamora
Segundo mandato: Jorge Quiroga Ramírez
Fecha de nacimiento:	1 de junio de 1930
Lugar de Nacimiento:	La Paz
Partido político:	Movimiento Nacionalista Revolucionario

Gonzalo Sánchez de Lozada y Sánchez Bustamante (1930) es un político, economista y empresario boliviano. Presidente de Bolivia durante dos ocasiones (1993-1997; 2002-2003), fue un estrecho colaborador del ex-presidente Víctor Paz Estenssoro del cual fue ministro en varias ocasiones, perteneciente al centro-derechista Movimiento Nacionalista Revolucionario (MNR), partido autor de la revolución nacionalista de 1952, de la reforma agraria de 1953, del sufragio universal y en la decada de los 90 en la propia persona de Sánchez de Lozada en empezar aplicar el neoliberalismo en la economía boliviana.

[editar] Primeros años

Gonzalo Sánchez de Lozada, familiarmente conocido como "Goni", nació en La Paz, 1 de julio de 1930 en el seno de una de las familias más ricas del país, en su juventud se crió en Estados Unidos (como la mayor parte de los hijos de representantes de las elites latinoamericanas), por lo tanto domina a la perfección el idioma inglés, incluso más que el español su otra lengua materna, que lo habla con un cargado acento estadounidense, por esto sus detractores lo llaman despectivamente el "gringo".

Estudió en las carreras de Filosofía y Letras Inglesa en la Universidad de Chicago; amplió conocimientos en cursos de economía. En Bolivia se inició en el mundo empresarial como productor de cine en la empresa Telecine, fundada por él. Posteriormente entró en el negocio de la minería creando la empresa COMSUR (Compañía minera del sur), explotadora del estaño en canteras del altiplano andino boliviano, amasando una importante fortuna.

Sin dejar su faceta de empresario ingresó en el mundo de la política afiliandose en el Movimiento Nacionalista Revolucionario (MNR), fue diputado y senador por este partido desde la decada de los 80 en el último gobierno del presidente Víctor Paz Estenssoro, fue elejido ministro de Planeamiento y Coordinación, cartera encargada de la materia macroeconomica y financiera del gobierno, entre enero y agosto de 1985 fue el encargado de aplicar la terapia de shock para intentar frenar la galopante inflación (del orden del 27.000%), que azotaba al país, con exito, pero a costas de un gran empobreciendo de la población, esta "receta" ultraliberal fue exportada a otros países de América, igualmente en su cargo de ministro "saneó" la administración de varias empresas estadales.

En las elecciones presidenciales de 1989 su partido lo presentó como candidato, siendo el candidato más votado (con el 25,6%) pero muy lejos de la mayoría absoluta, por lo que se estuvo que deslucidar una segunda vuelta en el congreso, que finalmente perdio, accediendo el tercer candidato mas votado (con el 21,8%) Jaime Paz Zamora del centroizquierdista Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR) que había pactado con Hugo Banzer (candidato que quedó en segundo lugar con el 25,2% de votos) lider del derechista partido Acción Democrática Nacionalista (ADN).

[editar] Primera Presidencia 1993-1997

En las elecciones generales celebradas en junio de 1993 se volvió a presentar, obteniendo otra vez el primer lugar con el 35,6% de votos, pero igualmente sin mayoría absoluta, Sánchez de Lozada, asumió la presidencia después de una segunda vuelta otra vez en el congreso pactando con el partido inigenista Movimiento Revolucionario Tupac Katari de Liberación, MRTKL, donde su dirigente el aymara Víctor Hugo Cárdenas accedía a la vicepresidencia. Asimismo, en las elecciones para el legislativo, su partido el MNR obtuvo la mayoría relativa

En el ejercicio de su primer mandato que culminaría en 1997, y en alianza con el centro-izquierdista Movimiento Bolivia Libre, (MBL), promovió importantes reformas legislativas, como la ley de Participación Popular, que daba por primer vez en Bolivia cierta autonomía y capacidad financiera a los municipios, la ley INRA de reforma agraria, luego de los escándalos agrarios del anterior gobierno, la ley Forestal, que incorporaba indígenas y organizaciones populares en la explotación sostenible de los bosques y otras.

Presionado por organismos internacionales como el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional, y por las políticas similares aplicadas en América Latina, Sánchez de Lozada promovió un amplio programa de privatizaciones que afectó al 50% de los ferrocarriles bolivianos, así como al petróleo, las telecomunicaciones, la electricidad y la línea aérea. Tanto la oposición como la opinión pública criticaron la concesión de ese 50% de los ferrocarriles a una empresa de Chile, país con el que Bolivia no mantenía relaciones diplomáticas: Siguiendo el rumbo económico neoliberal impreso ya por sus antecesores, redujo drásticamente los servicios sociales y aplicó otros como programas compensatorios entre ellos un bono anual a los ancianos de Bolivia, el Bonosol, aun vigente. Sin embargo después de la privatización para muchos bolivianos; estas empresas dejaron de aportar al Tesoro General de la Nación argumentando la carente utilidad de las mismas.

Según algunos analistas, uno de los mayores errores políticos de Sánchez de Lozada ha sido el gradual desmembramiento de la empresa nacional de hidrocarburos, YPFB. Sin embargo este proceso fue concluido por gobiernos posteriores y, aunque llevó a importantes inversiones extranjeras, no contó con el apoyo de la población del país y no consideró el gran apego que los bolivianos tienen a su empresa nacional de hidrocarburos. En 1997 fue sucedido en la presidencia por Banzer de ADN.

[editar] Segunda Presidencia 2002-2003

Sanchez de Lozada se mantuvo activo en la política y se volvió a presentarse a los comicios de 2002, logrando una vez más el primer lugar, pero también igualmente con la mayoría relativa (22, 46% de las papeletas) con un margen del 2% sobre su inmediato seguidor, el líder indígena Evo Morales. Sanchez de Lozada ganó en segunda vuelta en el parlamento, con un pacto con Paz Zamora y su partido el MIR, que ingresó en el gabinete de su gobierno.

En su segundo mandato continuó con la política económica neoliberal, mal recibida por algunos sectores sindicalizados, como los mineros y cocaleros bolivianos. En especial encontró fuerte y generalizada oposición en febrero de 2003 en el proyecto de aplicación de un impuesto a los salarios. Esto trajo como consecuencias huelgas, bloqueos de caminos, continuas manifestaciones, dirigidas en muchos casos por el propio Evo Morales, máximo líder de la oposición. Esto provoco que miembros del gabinete presidencial dimitiera y que Sánchez de Lozada pactara con el partido de oposición NFR, que ingresó en su gabinete

Otro plan presidencial, esta vez para financiar nuevos proyectos sanitarios y educativos con los beneficios obtenidos de la exportación de gas natural a Estados Unidos y México generó nuevos descontentos (agudizados además por la posibilidad de que el transporte se efectuara a través de puertos chilenos, país odiado por muchos bolivianos desde la Guerra del Pacífico) profundizando el conflicto social a partir de septiembre de 2003 que desembocó en manifestaciones, principalmente en el área andina, en busca de su renuncia.

Ante las dimensiones de la revuelta, que produjo decenas de muertos especialmente en la ciudad de El Alto, además de divisiones en el ejecutivo, Sánchez de Lozada fue obligado a dimitir el 17 de octubre de 2003, huyendo a Estados Unidos, siendo sustituido por su vicepresidente el independiente Carlos Mesa.

En 2004, en medio de la campaña por la presidencia del país, Sánchez de Lozada fue acusado por Evo Morales de genocidio y asesinato de manifestantes políticos, entre otras violaciones a los derechos humanos. Posteriormente, ya siendo presidente, Morales promovió en el parlamento abrir mediante el poder judicial un juicio de "responsabilidades" solicitando además su extradición al gobierno estadounidense.[1] Los partidarios del ex presidente ven una intencionalidad política en estas actuaciones.