Barrera israelí de Cisjordania
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La Barrera israelí de Cisjordania es una construcción defensiva israelí, construida en un 80% en territorio cisjordano[1], que consiste en una valla alambrada a lo largo del 89% de su trazado, y que en algunos tramos (alrededor de un 10% del total[2]) adopta la forma de un muro de hormigón prefabricado de hasta siete metros de altura, creada con módulos individuales dispuestos uno al lado del otro, e intercalados cada cierto intervalo con torretas para el control militar. Las partes de hormigón fueron erigidas para impedir ataques desde los edificios contra los vehículos militares que circulan en el lado israelí. Todo el sistema lleva aparejado una zona "estéril" de unos 50 metros de ancho que discurre a todo lo largo del trazado, que sigue en un 20% de su longitud la denominada Línea Verde (la línea fijada en el armisticio entre Israel y Jordania entre los años 1949 y 1967)). El resto de su longitud transcurre en territorio cisjordano (adentrándose una distancia que discurre entre los 200 m y los 20 km) con el fin de incluir asentamientos israelíes densamente poblados como Ariel, Gush Etzion, Emmanuel, Karnei Shomron, Givat Ze'ev, Oranit y Maale Adumim.
Sus detractores afirman que crea una realidad de facto que impediría un Estado árabe palestino viable, puesto que, en su opinión, Israel se anexiona parte del territorio del futuro Estado palestino, estableciendo serias dudas sobre su continuidad territorial y degradando notoriamente el nivel de vida de las poblaciones palestinas adyacentes al mismo, tanto por la destrucción y anexión de terrenos agrícolas fundamentales para la supervivencia de los poblados como por el aislamiento en el que se ha dejado a poblaciones enteras, que han quedado aisladas del resto del territorio palestino.
Para el gobierno de Israel, su propósito es proteger a los israelíes de los atentados suicidas, con una función de seguridad ante el incremento de los atentados tras la Intifada de Al-Aqsa y por tanto no trazada con fines políticos ni anexionistas. Los defensores de la barrera sostienen también que su eficiencia se constata por la drástica disminución del número de atentados de terroristas suicidas y aducen que no se diferencia de las de otros países (como España o Estados Unidos) que construyen vallas para defender su territorio.[3]
El Comité Internacional de la Cruz Roja ha dicho que la barrera, cuya longitud final –una vez finalizada toda su construcción– sería de unos 700 kilómetros, es una violación flagrante del derecho humanitario internacional.[cita requerida]
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[editar] Controversias acerca de su denominación
La denominación de la construcción es controvertida y está políticamente marcada. En Israel suele denominarse como «Valla de separación», «Cerca de seguridad» (en hebreo גדר ההפרדה, gader ha'hafrada) o también «Cerca antiterrorista». En los Territorios Palestinos suele denominarse en árabe como «Muro de la segregación racial» ( جذار الفصل العنصوري yidar al-fasl al-'unsuri), «Nuevo Muro de la Vergüenza» o «Muro del Apartheid» (Apartheid Wall), en referencia al régimen racista sudafricano, pese a que la barrera no tiene como objeto la segregación racial. En los medios de comunicación internacionales, suele utilizarse el término inglés barrier («barrera») y en España los medios de comunicación y la clase política acostumbran a denominarlo «Muro de Cisjordania».
En resumen, sus detractores ponen el énfasis en la parte que tiene de «muro» y sus defensores en la que tiene de «cerca» o «valla». «Barrera» es la denominación que escogen quienes buscan expresarse de forma más neutral.
[editar] Estatus actual de la Barrera
En junio de 2006, el 51% de los 703 kilómetros totales del proyecto del muro se encontraban ya construidos. El 13% se encontraba en construcción y el 36% restante se mantiene como proyectado aunque no se ha comenzado aún su contrucción. De los tramos ya terminados, 42 km son prefabricados de hormigón (el 11% de los 362 km ejecutados), mientras que 320 km (el 88% del total construido) consisten en un sistema de vallas de acero y carreteras de patrulla del ejército israelí de 50 m aproximadamente de anchura total.[4]
[editar] El impacto en la población palestina
La Oficina para la Coordinación de la Ayuda Humanitaria de la ONU en los Territorios Ocupados Palestinos (OCHAOPT) estima que, en el caso de concluirse el muro siguiendo sus últimas modificaciones, éste dejará a 60.500 palestinos de Cisjordania entre el Muro y la Línea Verde, o en otras áreas cerradas sin contacto con el resto de Cisjordania. Los palestinos que sufren ya esta situacion deben obtener un permiso de las autoridades israelíes para poder pasar el muro, y de esta forma tener acceso a los servicios fundamentales de educación, salud, trabajo y la posibilidad de realizar compras en el área de Cisjordania al otro lado del muro.[4]
De estos 65.000, unos 31.400 palestinos de 12 pueblos estarían totalmente rodeados entre dos tramos distintos del muro. Adicionalmente, 124.300 palestinos que viven en 28 pueblos estarían rodeados por tres partes por el muro, y controlados por la cuarta con una barrera física que los separará del resto de Cisjordania. Estas áreas son la ciudad de Qalqiliya, y las áreas de Biddya y Biddu. Además, estas poblaciones quedan aisladas de sus terrenos, principalmente destinados a agricultura, lo que dificulta aún más la supervivencia de estos pueblos[4]
Aproximadamente una cuarta parte de los palestinos que tienen el permiso de residencia israelí de Jerusalén están localizados en el lado este del Muro, lo que provoca que tengan que esperar largas colas diariamente en cualquiera de los cuatro controles de acceso a Jerusalén por trabajo o actividades de la vida cotidiana.
La construcción del muro alrededor de Jerusalén y del bloque de asentamientos de Ma´ale Adumim impediría el movimiento de los palestinos hacia Jerusalén y entre el norte y el sur de Cisjordania, pues bloquearía las principales carreteras palestinas[4].
[editar] La posición de Israel
El Estado de Israel sostiene que el muro es un legítimo medio de defensa ante el terrorismo palestino, que dejó cientos de víctimas mortales entre civiles israelíes inocentes, como prueba de lo cual señala la drástica disminución de terroristas que atentaran en centros urbanos israelíes, en aquellas zonas en que la valla está concluida. El muro ha causado hasta ahora 0 víctimas fatales o heridos.
El día 15 de septiembre de 2005, decidieron 9 jueces de la Corte Suprema de Justicia de Israel, en autos "Zaharan Yunes Mujamad Mara'ba contra el Estado de Israel y otros" (7957/04), que el Derecho Público Internacional y en particular el Tratado de La Haya de 1907, permiten la construcción del obstáculo por motivos de seguridad, aunque ordenó, por segunda vez, corregir el trazado de la barrera alrededor de la ciudad de Alfei Menashé, indicando que el recorrido actual agobia a la población civil palestina más de lo requerido por las razones de seguridad y topográficas aducidas. La Suprema Corte de Justicia israelí se desentendió de la decisión de la Corte Internacional de Justicia de La Haya, estimando que ésta se pronunció en el tema sin una adecuada base fáctica acerca de la situación sobre el terreno, y sin dar el peso adecuado a las razones de seguridad aducidas por el Estado de Israel.
Algunos israelíes se oponen a la barrera porque temen que constituya un reconocimiento político de la línea de armisticio de 1949, la ex Línea Verde, violado en sucesivas ocasiones por los países árabes vecinos. Las decenas de miles de judíos que viven en Cisjordania y se han quedado fuera de la barrera temen también quedar desprotegidos. Algunos grupos minoritarios israelíes de extrema izquierda, como Anarchists Against the Wall, se oponen, según afirman, «en defensa de los derechos humanos».
El 29 de diciembre de 2006, la ministra israelí de Asuntos Exteriores, Tzipi Livni, anunció una iniciativa personal de paz, consensuada en secreto con líderes moderados palestinos de Fatah, y que supuestamente incluiría la creación de un Estado palestino provisional y cuyo "punto de referencia" sería la controvertida barrera de Cisjordania.[5] Sin embargo, el jefe de Gobierno israelí, Ehud Olmert, lo desautorizó casi inmediatamente.[6]
[editar] Resolución de la Corte Internacional de Justicia
El 8 de diciembre de 2003, en una sesión de emergencia de la Asamblea de la ONU, se decidió solicitar un dictamen a la Corte Internacional de Justicia (CIJ) para que se manifestara sobre las "consecuencias legales" de la barrera israelí. La resolución de la Asamblea fue muy polémica porque fue adoptada sin contar con la mayoría de miembros (solo 90 de los 191 la respaldaron) y obligaba a la Corte a pronunciarse sobre un contencioso político de forma unilateral (según el artículo 36 de los estatutos de la Corte, los asuntos contenciosos solo pueden elevarse a la Corte con el consentimiento de todas las partes).
El 9 de julio de 2004, la Corte Internacional de Justicia (CIJ), en una decisión consultiva pero no vinculante que recibió el voto a favor de 14 jueces y de uno en contra, dictaminó que Israel tiene la obligación de suspender la edificación de la barrera y de desmantelar las estructuras ya erigidas que se adentran en Cisjordania.
Además, la Corte determinó que el gobierno israelí tiene la obligación de reparar el daño que ha causado en el territorio árabe palestino ocupado, incluido el Este de Jerusalén y sus zonas aledañas.
El dictamen sostuvo también que la comunidad internacional no debe reconocer la situación ilegal derivada de la construcción del muro ni dar asistencia para mantenerla.
Luego de deliberar durante cuatro meses para emitir el dictamen, los magistrados de la Corte consideraron que la Asamblea General y el Consejo de Seguridad de la ONU deben tomar medidas adicionales para resolver el problema.
Al conocer la opinión del máximo órgano judicial de las Naciones Unidas, Kofi Annan, entonces secretario general de la Organización, la dirigió a la Asamblea General –la instancia que solicitó originalmente la intervención de la CIJ– para que determine cómo procederá ante este conflicto.
Israel rechazó el dictamen de la Corte porque consideró que prejuzgaba políticamente y que se centraba en el resultado (la barrera) sin ocuparse de la causa (el terrorismo palestino). Por ello, a pesar de esta resolución internacional, Israel continúa su construcción en la actualidad, pues, además de no ser una resolución vinculante, considera que la CIJ se pronunció en el tema sin un adecuado conocimiento sobre el terreno y sin dar el peso adecuado a las razones de seguridad de Israel.
[editar] Referencias
- ↑ Preliminary Analysis of the Humanitarian Implications of February 2005 Barrier Projections
- ↑ Israel High Court Ruling Docket H.C.J. 7957/04
- ↑ Valla de seguridad de Israel
- ↑ a b c d Informe de la Agencia de la ONU para los Territorios Ocupados Palestinos sobre el Muro israelí de Cisjordania (julio de 2006)
- ↑ The Livni Plan, 29-12-2006, Haaretz.
- ↑ Rebelión en el Gobierno israelí, El País, 30-12-2006.
[editar] Enlaces externos
- Grafico interactivo
- Mapa de la barrera en julio de 2006
- Información extra del muro
- Sitio oficial Israelí - en Ingles
- Ni muro ni vergüenza, de Víctor Harel. Artículo publicado en El Mundo, 18 de enero de 2004, por el Embajador de Israel en España.